08 diciembre, 2008

Tengo tiempo




Tardes donde la hora no importa.
Donde el castigo silencioso del minutero te atormenta.
No existe otro
mundo,
solo tu capciosa mentalidad
creo una gama de sensaciones
imperceptibles por el otro.
Quizá sin tangibilidad.

La sensación de
querer
se esconde tras los velos de risas y complementación innata
sólo
hay que buscarla.